Mi finca se llama “Las tres Marías”, y se llama así por mis tres hijas. Fui papá muy joven, y cuando uno es joven, todo aterra y cada paso se siente tan inseguro, y más difícil es cuando la vida de una bebita depende de esa alma tan nueva. El ser padre ha sido mi trabajo más importante, y muchas veces me he preguntado si lo he hecho bien, pero de inmediato me viene a la mente esos cabellos despeinados, esos besos pegajosos y esas risas de cuando eran niñas, que corrían hacia mí cada que llegaba de mi trabajo. Pienso en que siempre me buscaban para ser partícipe de sus alocados juegos. Pienso en cuando en un cerrar de ojos, llegaron a esa etapa tan difícil de la vida, pero que me seguían buscando para consolarlas. Y ahora, veo las mujeres en las que se han convertido, mujeres fuertes y trabajadoras, con una forma espectacular de ver la vida. Al verlas, me atrevo a decir “He hecho un buen trabajo”.
Tiphanie Zúñiga Rivera